14 abril, 2008

El tiempo es un fantasma inventado, que pedimos a gritos cuando algo inesperado nos sucede. Espero ahora que no tenga paciencia y pase despiadado, se asome y desaparezca para cuando despierte. En estos vientos de angustia escogida al azar, para darle amargo a la vida, levanto la voz a lo único que me importa.

Qué mas podría yo hacer? Siendo una mujer tan imperfecta como cualquier otra, sabiendo las mismas cosas? Las palabras antes de dormir son siempre las más complicadas, los momentos antes del sueño, los mas crueles.

Porque no hay nada más difícil que llenar una cama vacía, saturada de cuerpos inertes que se niegan a generar calor, me dejo llevar por la indolencia y espero, tiempo, que me socorras pronto. Y en este día estéril, deshauciado, me dejo inventar de nuevo alguna miseria.

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