17 noviembre, 2007

Cantiantonio

Entre los pasos artificiales de unos pies de plástico, entre cabellos mojados con saliva, escucho tus metálicos sonidos, entre tambores africanos.

Aprieta contra el suelo, desplaza la norma hacia algún extremo... margaritas tostadas por un cielo anquilosado. Te miro y me arranco, escondo el nudo que me atravieza la garganta. Mirada vacía/llena, de cosas por comprender y satisfacciones pospuestas para el día en que también puedas correr a algún sitio.



Ausencia, cuando no existimos por completo, pero estamos repletos de plenitud.
Cuando muestras tus extremos, y rechazas la verguenza.

Cuando me miras.... y sonríes sinceramente, aunque te duela.